San Francisco de Asís, nacido Giovanni di Pietro di Bernardone en 1181/1182, es uno de los santos más venerados del cristianismo. Su historia es un ejemplo de radical conversión y dedicación a Dios. Tras una juventud acomodada, renunció a todos los bienes materiales para abrazar una vida de pobreza, oración y servicio a los pobres y a los marginados.
Fundador de la Orden de los Hermanos Menores (Franciscanos), su espiritualidad se basaba en la imitación de Cristo, en el amor por la creación y en la paz. Es célebre por el "Cántico de las Criaturas", un himno a la belleza de lo creado, y por haber recibido los estigmas, los signos de la pasión de Cristo.
La veneración de San Francisco es universal. Es patrono de Italia, de los animales, de la ecología y de los mercaderes. Su figura inspira a millones de personas por su humildad, caridad y su mensaje de fraternidad y armonía con la naturaleza. Su tumba en Asís es meta de peregrinación para fieles de todo el mundo.