San Andrés, uno de los primeros apóstoles de Jesús y hermano de Pedro, es una figura central en el cristianismo. Originario de Betsaida, en Galilea, era un pescador antes de seguir al Mesías. Su historia está llena de devoción y sacrificio: fue él quien presentó al joven con los panes y los peces a Jesús, episodio que llevó al milagro de la multiplicación. La tradición narra que predicó el Evangelio en diversas regiones, entre ellas Escitia, Tracia y Acaya, donde sufrió el martirio en Patras, crucificado en una cruz en forma de X, de ahí el nombre "Cruz de San Andrés". Es venerado como patrón de Escocia, Rusia, Grecia y Rumanía, de los pescadores y de los carniceros. Su fiesta se celebra el 30 de noviembre, día en que se celebra su inquebrantable fe y su papel fundamental en la difusión del cristianismo.