Santa Rita de Casia con rostro angelical, crucifijo en brazos, estatua de madera; Santa Rita nació en Roccaporena (Cascia) hacia 1380. Según la tradición, era hija única y desde su adolescencia quiso consagrarse a Dios, pero debido a la insistencia de sus padres, fue dada en matrimonio a un joven de buena voluntad pero de carácter violento. Tras el asesinato de su marido y la muerte de sus dos hijos, sufrió mucho por el odio de sus familiares con los que, con fortaleza cristiana, consiguió reconciliarse. Viuda y sola, en paz con todos, fue acogida en el monasterio agustino de Santa María Magdalena, en Cascia. Vivió cuarenta años en la humildad y la caridad, en la oración y la penitencia. En los últimos quince años de su vida, llevó en la frente el signo de su profunda unión con Jesús crucificado. Murió el 22 de mayo de 1457. Invocada como taumaturga de las gracias, su cuerpo se venera en el santuario de Cascia, meta de continuas peregrinaciones. Beatificada por Urbano VIII en 1627, fue canonizada el 24 de mayo de 1900 por León XIII. Se la invoca como santa del perdón y pacificadora de Cristo.
Martirologio Romano: Santa Rita, monja, casada con un hombre violento, soportó pacientemente sus malos tratos, reconciliándolo con Dios; más tarde, dejada sin marido e hijos, ingresó en el monasterio de la Orden de San Agustín en Cascia, en Umbría, ofreciendo a todos un ejemplo sublime de paciencia y compunción.