Esta refinada estatuilla de madera, pintada a mano con colores al óleo típicos de los años 80, representa a una dulce niña que sostiene un gran ramo de flores coloridas. Una pieza única que une arte y nostalgia, perfecta para enriquecer con calidez y originalidad cada ambiente. Ideal para quien ama objetos artesanales con encanto vintage, esta creación aporta un toque de gentileza y serenidad a tu hogar. Añade a tu colección un detalle artístico y lleno de vida, perfecto como regalo especial o para tu decoración personal.
Selección de la madera
Todo comienza con la elección de maderas nobles y sostenibles, cuidadosamente seleccionadas por su resistencia, veteado y calidad.
Tallado a mano
Cada pieza es esculpida por artesanos expertos que transforman la madera en formas únicas, con precisión y pasión.
Acabado y envío
Acabado a mano, control de calidad y embalaje elegante: tu objeto está listo para llegar a casa